El problema de la contaminación ambiental en la comuna de Codegua y el de la mayoría de las comunas que comprenden la Región de O'Higgins, es grave y esta situación pareciera que no le importa a nadie. Tratar este tema es difícil, porque no sensibiliza al común de la gente, pero me voy a referir a él, porque a mí personalmenete me ha corrrespondido ser testigo de indiscriminadas fumigaciones que invaden en pocos minutos los hogares de la comunidad que vive cercana a los predios agrícolas y frutícolas. Digo que es un problema grave, porque los productos que se utilizan en estas actividades de fumigación, son altamente contaminantes y no es necesario ser experto en la materia, para darse cuenta de ello. Los síntomas que provocan las partículas que se aspiran, no se hacen esperar: fuertes dolores de cabeza, mareos, irritación de la vista, picazón de la piel, entre otros y un ambiente irrespirable, es el escenario frente a este problema.

Tengo entendido que existe una disposición de la Comisión Nacional del Medio Ambiente, CONAMA, que está notificada a los empresarios agrícolas, la que consiste en llevar a cabo las fumigaciones en horarios, en que el daño sea el menor (después de las 17:00 horas). Lo anterior no se respeta y la prueba de ello es que se hacen a cualquier hora. Hasta hace poco tiempo esta actividad se hacía en forma aérea, afortunadamente esto no ocurre en la actualidad, pero la forma en que se hace, provoca situaciones que lesionan la salud de la comunidad en general.

Nuestra comuna de Codegua presenta un alto índice de almnos y alumnas con problemas de aprendizaje (sobre un 25%) y lo que es peor, existen muchos niños y niñas con problemas limítrofes, situación que me lleva a sostener que es probable que exista un vínculo entre la exposición a estas fumigaciones, no sólo de los padres, sino que también de las madres, en estado de embarazo o simplemente sin esta condición, porque pareciera que el contacto con estos productos contaminantes, es acumulativo y sus efectos son transmitidos a los hijos e hijas.

Da la impresión que la comunidad no está consciente de los peligros que enfrenta, al ser invadida por estas nubes tóxicas, que demoran horas en desaparecer del ambiente.

Pero los habitantes de Codegua, también deben soportar durante todo el año, los tóxicos olores emanados de otro tipo de empresas, que nada han hecho, al menos en Codegua, para buscar una forma que permita dar solución a esta preocupante y desagradable situación, que en temporada estival se agudiza, produciendo una invasión de fuertes olores, que impregnan las casas, tanto en su parte externa como interna.

Pongámonos en el caso de una madre embarazada, que respira durante los 9 meses de gestación los malos olores, que cada tarde y noche invaden el radio urbano y rural de la comuna. Lo que ocurre en Codegua, es un atentado contra la vida y la salud de las futuras generaciones de niños y niñas. Pero mientras la comunidad no tome real conciencia que es su deber, exigir vivir en un ambiente sano y libre de contaminación, porque es un derecho que le corresponde, se continuará con este problema, que impresiona a muy pocas personas, salvo en época de elecciones, que es cuando se alzan algunas voces, con los propósitos ya conocidos por todos.